Desde hace varias semanas, la capital del país enfrenta un pico en infecciones respiratorias y otras enfermedades que están causando que los bogotanos se estén enfermando fácilmente. La tosferina, infección respiratoria aguda (IRA) y la fiebre amarilla son algunas de ellas.Esta última se registra en Bogotá, ya que son personas que vienen de otros puntos del país, pero que son atendidos en la ciudad.
Frente a esto, la Secretaría Distrital de Salud emitió un llamado urgente a la vacunación tras el aumento de casos de tosferina en la ciudad. La enfermedad, que es altamente contagiosa, causó la muerte de un bebé de un mes y 25 días el pasado 27 de febrero. La muerte de este menor de edad encendió las alarmas en el sector de la salud.
En lo que va de 2025, la situación sigue siendo preocupante. Hasta el 21 de febrero se han notificado 22 casos probables y 3 confirmados en menores de cinco años, dos de ellos en la localidad de Suba.
Además, el 11 por ciento de los casos en menores de cinco años correspondieron a población migrante. Las localidades con casos confirmados en 2024 fueron Suba (3 casos), Ciudad Bolívar (2 casos) y Usaquén, Usme, Barrios Unidos y Los Mártires con un caso cada una.
Hay que tener en cuenta que los bebés menores de un año, pero principalmente los menores de seis meses, son el grupo más vulnerable, ya que pueden desarrollar complicaciones graves como neumonía, convulsiones, encefalopatía (daño cerebral) o incluso la muerte. Aun así, esta enfermedad también puede llegar a afectar gravemente a mujeres embarazadas y a adultos mayores con enfermedades preexistentes.